Ultrasonido Intravascular (IVUS)

La ecografía intravascular (IVUS) es una técnica de imagen avanzada y mínimamente invasiva que permite obtener una visión detallada de 360° del interior de los vasos sanguíneos. A diferencia de los métodos de imagen tradicionales, como la venografía, que solo muestran el contorno de las venas, la IVUS proporciona una visión detallada y en tiempo real de la estructura interna de las paredes venosas. Esto la convierte en una herramienta invaluable para diagnosticar con precisión afecciones como la compresión venosa (síndrome de May-Thurner), el estrechamiento de las venas profundas o la insuficiencia venosa crónica, y para guiar con precisión tratamientos como la colocación de stents o la angioplastia.

Preparación: La ecografía intravascular (IVUS) se suele realizar como parte de un procedimiento diagnóstico o terapéutico, a menudo junto con una venografía o durante la colocación de un stent venoso. Se realiza con anestesia local de forma ambulatoria. Permanecerá despierto mientras se limpia y anestesia la piel cerca del punto de acceso.

Inserción del catéter: Se realiza una pequeña punción en la piel y se introduce un catéter delgado y flexible en una vena mediante guía radiológica en tiempo real (fluoroscopia). El catéter se avanza suavemente hasta la zona a evaluar.

Colocación de la sonda IVUS: Una vez colocada, se activa una pequeña sonda de ultrasonido situada en la punta del catéter. A medida que se desplaza por el vaso sanguíneo, utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes transversales detalladas del interior de la vena.

Imágenes y mediciones en tiempo real: Estas imágenes de ultrasonido en vivo proporcionan información precisa sobre el tamaño, la forma y la estructura de la vena, así como la presencia de estrechamientos, cicatrices, compresiones o acumulación de placa. La ecografía intravascular (IVUS) también puede medir el diámetro exacto de la vena, lo cual es fundamental para planificar tratamientos como la selección del tamaño y la colocación de stents.

Tratamiento opcional: Si se confirma un estrechamiento u obstrucción, a menudo se pueden realizar de inmediato procedimientos como la angioplastia o la colocación de un stent, guiados por las imágenes IVUS para obtener la máxima precisión.

Finalización y recuperación: Una vez completadas las pruebas de imagen y cualquier tratamiento necesario, se retira el catéter y se coloca un pequeño vendaje. La mayoría de los pacientes reciben el alta el mismo día.

Recuperación y resultados: La recuperación tras una ecografía intravascular (IVUS) suele ser rápida y sencilla, y la mayoría de los pacientes retoman sus actividades normales en 24 horas. Dado que la IVUS proporciona mucha más información que las técnicas de imagen convencionales, a menudo permite diagnósticos más precisos y tratamientos más eficaces, lo que reduce el riesgo de complicaciones o la necesidad de repetir procedimientos.